Suplantación de identidad en tiempos de pandemia

 


Con el confinamiento derivado de la pandemia del Coronavirus todos hemos tenido que adaptarnos a la nueva forma de llevar a cabo nuestras actividades diarias, como el pedir comida a través de una aplicación, asistir a clases virtuales por medio de una plataforma de videoconferencias, trabajar bajo la modalidad de “home office”, étc.

El tener que pagar o adquirir servicios vía Internet se ha convertido en una necesidad común para salvaguardar nuestra vida por lo acontecido mundialmente.


Nos estamos protegiendo de un virus que puede afectar nuestra salud, pero ¿sabes que también debemos cuidarnos virtualmente?


La mayor parte de nuestro tiempo nos encontramos navegando en Internet, por lo cual, estos días más que nunca compartimos información personal que podría ser interceptada por ciberdelincuentes.

Aunque quisiéramos que no existiesen este tipo de personas mal intencionadas las hay, y por tanto debemos mantenernos alertas de no ser víctimas de un robo de datos personales y usurpación de identidad.

Y es que con la crisis financiera que estamos viviendo, afectaría mas que nunca ser victima de un asunto así.

Existen diversas formas en las que un ciberdelincuente puede robar sus datos personales:

  • A través de correos de phishing, con malware diseñado para robar contraseñas una vez que el usuario lo descarga en su dispositivo.
  • Por medio de aplicaciones móviles, principalmente aquellas que se encuentran en foros o sitios no oficiales.
  • Intercepción en las redes sociales, utilizando cualquier dato que compartas públicamente, como por ejemplo: nombre completo, fecha de nacimiento, étc.
  • A través de redes Wi-fi públicas, las cuales son frecuentemente espiadas por delincuentes.

En los últimos meses, personas malintencionadas están aprovechando para hacer sus campañas de phishing de manera más intensa, usando de señuelo marcas populares como Microsoft, DHL o Amazon.

¿Cómo proteger sus datos en línea?

  • Utilizar contraseñas complejas para todas sus cuentas.
  • No compartir datos importantes en las redes sociales.
  • Reportarse inmediatamente con su banco si se sospecha de actividad irregular.
  • No utilizar el Wi-Fi público para realizar pagos o acceder a sus cuentas sin usar una VPN.
  • Verificar que los sitios web que visita sean HTTPS.
  • No abrir enlaces o archivos adjuntos en el correo si desconoce al remitente o no se trata de un mensaje que estaba esperando.
  • Descargar aplicaciones solo de sitios oficiales.
  • Utilizar soluciones de seguridad que le ofrezcan la protección de sus datos mientras navega por la web.

Es importante no dejar de lado la seguridad de la información personal que enviamos por medio de las diversas aplicaciones y plataformas en línea, de esa manera puede evitar ser una víctima más del cibercrimen.